Una vez que tienes todas estas cosas en mente es hora de ponerse a trabajar. Si detectas alguno de los síntomas en tu perro ponte manos a la obra, solicita ayuda a un profesional y no dejes pasar el tiempo. Cuanto antes lo hagas antes se recuperará tu perro.

Muchos perros se recuperan gracias al compromiso de sus propietarios con el tratamiento. Si estás dispuest@ a ayudar a tu perro, ¡lo puedes conseguir!